Un físico limpio
Como es habitual en Apple, nada se deja al azar cuando se trata de diseño. Así, los AirPods retoman la forma clásica de los EarPods, esos auriculares que venían con todos los iPhone y todos los iPods desde hace varios años. Sin embargo, han abandonado el contorno de silicona para mantener una forma muy armoniosa, en un plástico liso y ultra brillante. Un diseño que se adapta a todo tipo de oído.
Con un peso pluma de 4 gramos por auricular, los AirPods saben pasar desapercibidos en el hueco de nuestras orejas. El estuche, por su parte, pesa solo 38 gramos y cabe en cualquier bolsillo, ya sea en la ropa o en un bolso. Se trata entonces de un producto ultra portátil, por lo tanto, ¡pero ten cuidado de no perder esta pequeña caja de plástico brillante tan resbaladiza como una pastilla de jabón!
Una batería sólida como una roca
Uno de los puntos fuertes de los AirPods es sin contexto la longevidad de su batería. Imagina poder aguantar un día entero escuchando tu música, viendo tus series o haciendo tus llamadas sin tener que preocuparte por la batería de tus auriculares inalámbricos. Bueno, no te preocupes, los AirPods tampoco son mágicos, pero el sistema de carga de los auriculares a través de su funda sin tener que enchufarlos constantemente es una auténtica proeza técnica y una auténtica pequeña revolución en nuestras vidas.
Los tiempos de duración de la batería indicados en la web del fabricante son:
24 horas de escucha y 11 horas de conversación recargando regularmente tus AirPods en su estuche (contando, por tanto, con la autonomía del estuche).
5 horas de tiempo de escucha y 2 horas de conversación para un uso de los auriculares después de una sola carga en su estuche.
3 horas de escucha y 1 hora de conversación tras cargar los AirPods durante tan solo 15 minutos en su estuche.
Lo comprobamos, y las cifras anunciadas a veces están incluso por debajo de la capacidad real (en equipos nuevos, por supuesto).