¿Cómo es la experiencia de juego en la Switch?
Antes de entrar en el "cómo", vamos a tocar brevemente el "qué". Porque Nintendo tiene una de las mayores colecciones de juegos a las que puedes acceder directamente en la Nintendo Switch a través de Wi-Fi. El catálogo de juegos tiene la ventaja de incluir los grandes éxitos de Nintendo, como Zelda: Breath of the Wild o Mario Odyssey, pero también juegos ajenos a Nintendo, como Skyrim o The Witcher 3. ¡Y eso por no hablar de la gran cantidad de juegos independientes que han surgido en Switch en los últimos años!
Pero aunque la oferta parezca infinita, la Nintendo Switch tiene aquí algunas limitaciones relacionadas con su tamaño. No es tan potente como algunos de sus competidores, como la Xbox One y la PS4. Esto afecta especialmente a juegos como Resident Evil, que funcionan mejor en consolas muy potentes con mejor resolución.
La resolución, en particular, es muy importante en los videojuegos. La Nintendo Switch tiene una pantalla LCD de 6,2 pulgadas con una resolución de 1280 x 720 píxeles. A modo de comparación, esto es más o menos el tamaño de la pantalla de un iPhone 11, que es popular para los juegos móviles. Sin embargo, el iPhone 11 llegó con una densidad de píxeles de 1792 x 828. La pantalla de la Nintendo Switch tiene más o menos el mismo tamaño, pero con menor resolución.
El siguiente punto relevante es la batería, porque si te interesa el modo portátil, la duración de la batería es crucial. Cuenta con una autonomía de entre 4 y 9 horas para la Nintendo Switch. El tiempo de ejecución exacto depende del juego que estés jugando. Como referencia, según Nintendo, la batería del juego "The Legend of Zelda" dura unas 5,5 horas.